Ha pasado ya mucho tiempo desde que la idea de poner en marcha una marca de accesorios de piel para mujer empezó a gestarse en mi cabeza, finalmente nos lanzamos. Siempre hemos querido darle un sentido a este proyecto, ir más allá de la idea de vender unos bolsos, transmitir unos valores, ahora más que nunca. Cuando decidimos llamar a nuestra primera colección “Victoria” nunca imaginamos que este nombre de mujer que representa la Victoria Alada de Samotracia, significaría tanto…

Creímos que el ser humano ya no sería capaz de repetir algunos errores catastróficos, devastadores, ahora que creímos haber aprendido, que ciertas atrocidades formaban parte del pasado, un pasado que nunca volvería…

Nuestro pequeño proyecto se desarrolló en medio de la pandemia del Covid 19 y ahora finalmente lanzamos la marca con mucha ilusión, una ilusión ensombrecida por la tristeza de ver cómo el ser humano capaz de las más grandes hazañas, las más increíbles creaciones, es capaz también del infligir el sufrimiento y la devastación más atroces, se queda uno paralizado, atónito, desconcertado, pero ¿qué clase de criatura es el ser humano?

Es tan desconcertante que escapa a nuestro entendimiento, no hay una explicación, soló podemos hacer nuestra la realidad, no escondernos, no mirar hacia otro lado, más bien ponernos en actitud de Victoria, que cada una libre sus propias batallas con toda la valentía y la dignidad de la que somos capaces y luchar frente a los que quieren arrebatarnos nuestra vida, nuestros valores, nuestros cimientos.